El Amor a la Espiritualidad.

La firmeza en la Fe es como un arbol bien arraigado en las fuentes de agua viva

“Quien permanece en el amor, permanece en Dios y Dios permanece en él” (1 Jn. 4,16)

Amar y hacer amar el amor de Dios

“El poder asistir a la Divina Liturgia, fue un regalo de Dios, porque me permite compartir con mis hermanos y hermanas, cada uno con distintas realidades, pero con una misma Espiritualidad, un mismo carisma, una misma llamada de parte de Dios a una vida seglar, contemplativa y apostólica.

La espiritualidad que nos une, hesicasta, es la búsqueda en cada momento del encuentro con nuestro Señor, nos confirma en el sentido y en la misión de vida que Él nos ha dado. En nuestro trabajo que realizábamos. Con los retiros que realiza monseñor Franz de la Compación, nos fortalecíamos mutuamente con nuestras propias vivencias.