Santo Apóstol Santiago, hermano de Juan, el Teólogo.

30 de abril

Santo Apóstol Santiago, hermano de Juan, el Teólogo.

(+ 44 de J. C.)

Patrono de la diócesis de Santiago del Estero, de la provincia de Mendoza (Argentina) y de la ciudad y arquidiócesis de Santiago de Chile.

Por Fr Estephanos

El protomártir de los apóstoles, Santiago el Mayor, luz y patrón de las Españas, fue natural de Galilea hijo de Zebedeo y de María Salomé, hermano mayor de san Juan evangelista y primo de Jesucristo según la carne, fue uno de los apóstoles del Divino maestro, fueron ambos hermanos pescadores y andando el Señor a la ribera del mar de Galilea, violes en un  navío con su padre Zebedeo, remendando las redes y los llamó, y ellos dejando al punto las redes y a su padre, le siguieron, múdoles el Señor, el nombre y por su ardoroso celo,  los llamó Boanerges  que quiere decir “hijos del trueno”, y después san Pedro a quien mudo también el nombre, fueron estos dos hermanos, los discípulos favorecidos del Salvador. Porque los llevó consigo cuando los fue resucitar a la hija del príncipe de la sinagoga; quiso que fuesen testigos en el Tabor, y de su mortal tristeza en el huerto de Getsemaní, y después de su resurrección hizo que se hallasen   presentes a casi todas sus frecuentes  apariciones. Refiere el evangelista san Lucas que viendo los dos hermanos Santiago y Juan que los samaritanos no querían hospedar al Señor, le dijeron, ¿quieres que hagamos bajar fuego del cielo que abrase esta gente? Mas Jesús les respondió; no sabéis de que espíritu sois; dándoles a entender que él no había venido a dar la muerte a los pecadores sino a dar la vida por ellos para darles la vida eterna. En otra ocasión la madre de esto dos hermanos se atrevió a pedirle que en su reino hiciese que el uno de ellos se sentase a su diestra y el otro a la siniestra; mas el señor les dijo No sabéis lo que pedís; porque pedían dignidad temporal. Preguntóles si podían beber del cáliz que Él mismo había de  beber; y como respondieron animosos que si, el Señor les profetizó que en efecto lo beberían y padecerían el martirio por su amor. Después de la ascensión de Jesucristo predicó Santiago en Jerusalén, Judea y en Samaría; y habiendo los judíos apedreado y muerto a san Esteban, y levantándose esta grande tempestad en Jerusalén contra la Iglesia, el santo apóstol vino a España echando los primeros fundamentos de la fe y convirtió a algunos hombres a la fe, de los cuales siete fueron ordenados obispos por san Pedro y pasaron a España, Llegado Santiago a Zaragoza, salió con sus discípulos a la ribera del Ebro para orar y donde es tradición que la Reina de los Ángeles que aun vivía, se le apareció en carne mortal en una columna o pilar de jaspe, y le dijo para alentarlo en esta empresa : “en este lugar labrarás  una Iglesia de mi nombre porque desde ahora tomo esta nación debajo de mi amparo.” Volvió después el santo apóstol a Jerusalén donde los judíos le hecharon una soga a la garganta y acudiendo los soldados le prendieron y llevaron dentro del rey Herodes, el cual por dar contento al pueblo le mando a degollar. Fue el primero en derramar su sangre por Jesucristo hacia el año 32 d. J. Sus reliquias fueron trasladadas a Compostela, durante muchos años, recibió el homenaje de millones de peregrinos, de todas partes del mundo, como si fuera el santo sepulcro de Jerusalén. Es el patrono de España, que ha visto en ella través de los siglos  lo mismo que América al defensor de la fe. La fecha del 25 de julio es aniversario de su traslación.

Esta en una de las cuestiones más delicadas de la iglesia española. Existe en España una tradición antigua y unánime de que Santiago el mayor vino a España en el año 39 al 42 de nuestra era, en una embarcación griega o fenicia, probablemente ya que estas eran las que mantenían el comercio en casi todos los puntos del mediterráneo, sobre todo en los extremos. Según esto, el apóstol Santiago desembarcaría en algún puerto de Bética o de la Tarraconense y llego después en su predicación hasta Cesaraugusta (Zaragoza). El breviario propio de los santos de España, dice lo siguiente: “después de la ascensión del Señor a los cielos, predicó (Santiago) su divinidad en Judea y Samaría, donde convirtió allí algunos en Cristo, de entre  los cuales, siete, ordenados mas tarde obispos por san Pedro, fueron los rimeros que se dirigieron a España”. Es de advertir que los documentos que se pueden citar para confirmar la tradición data, os dudosos del siglo IV, y los ciertos del siglo VII. No se puede ir más allá en esta cuestión en punto a crítica histórica rigurosa. Ahora ¿pudo tener esta tradición, tan general y tan unánime, algún otro fundamento que nosotros desconocemos al presente? Debe de ser así pues no se encuentra explicaron satisfactoria de otro modo.

Reflexión; grandes han sido las mercedes que nuestro Señor ha hecho a los reino de España por medio de este gloriosísimo apóstol; porque de él recibieron la luz de la fe, y el primer templo labrado a la madre de dios, y la celestial protección contra los moros, hasta capitanear el mismo   santo apóstol nuestros ejércitos, montado sobre un caballo blanco, y con un grande estandarte blanco en la mano, como se vió en la gran famosa batalla de Clavijo, por lo cual la señal de acometer los soldados españoles y cerrar con el enemigo, comenzó a hacer la señal de la cruz y decir: “¡Santiago, y cierra España!” Invoquémosle pues el rogar por nuestra patria, para que la libre de sus capitales enemigos.

Oración: Santiago, Señor, y guarda a tu pueblo, para que amparado por la protección del bienaventurado apóstol Santiago, te agrade con sus virtuosas costumbres y te sirva en paz. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amíñ.

Los restos de Santiago en España: los Hechos de los Apóstoles: XII, 2, dice simplemente que Santiago fue degollado por Herodes en Jerusalén, acerca de lugar de la inmediata sepultura hubo algunas opiniones siendo la más fondada y natural que este apóstol fue enterrado en Jerusalén. Una antiquísima y tradicional segura e interrumpida tradición asegura que el cuerpo de Santiago fue traído a España por algunos de sus discípulos, que lo sepultaron en un sarcófago de piedra, en un lugar próximo a la antigua Iria en Galicia. En el siglo IX se descubrió milagrosamente dicho sepulcro, y el monarca entonces reinante, Alfonso II el Casto, levantó un pequeño templo sobre él. Este templo sufrió muchas vicisitudes en el correr de los años hasta que fue sustituido por la actual Catedral, en los siglos XI y XII. En  el siglo XVI, por temor de las incursiones del corsario Drake fueron ocultadas las reliquias en un lugar, dentro del mismo templo, el cual permaneció ignorado hasta el siglo XIX, en que por disposición arzobispo que gobernaba aquella iglesia, se hicieron oportunas excavaciones y aparecieron los restos del apóstol, y de sus dos discípulos Teodoro y Atanasio y ruinas de una cella o sepulcro de la misma naturaleza que los erigidos en Roma en los primeros tiempos del cristianismo. El minucioso proceso que se levanto por tal motivo terminó con la Bula Deus Omnipotens, del papa León XIII, expedida el primero de noviembre de año 1884, reconociendo canónicamente la identidad de las reliquias halladas y prohibiendo bajo pena de excomunión su traslación, disminución, etc, en lo futuro.

Los documentos escritos que testifican la tradición no pasan del siglo IX; los más conocidos son a epístola del apea san León III y el Códice Calixtino, conservado en la catedral compostelana. El hecho de la primera invención de las reliquias consta en un diploma de Alfonso II expedido el 829, aunque su texto completo es algo discutido. A partir de esta fecha son abundantes los testimonios sobre la materia en cuestión. En el siglo XI aparece  el nombre de  Campus Stellae (Compostela) en sustitución de  los antiguos nombres topográficos qque se daba al lugar en que se encontraba el sepulcro de Santiago, el nombre hace relación sin duda a las luces maravillosas que aparecieron en dicho lugar en tiempo de la invención de las reliquias. La catedral que se encuentra allí fue comenzada por el obispo Pelaez y ha venido sufriendo distintas modificaciones arquitectónicas y decorativas hasta el siglo XVIII, sin perder por eso su magnificencia. El obispo Diego Gelmirez regalo una parte del cráneo de Santiago a la Iglesia de Pistoya, esa reliquia fue reconocida científicamente y comparada con los huesos hallados en el siglo XIX y se demostró su identidad absoluta.

El sepulcro de Santiago ha sido siempre uno de los puntos principales de peregrinación para todo el orbe católico, sobre todo para los habitantes de las Galias, lo cual dió lugar cierto intercambio y comunicación de civilizaciones. La devoción a Santiago en España es de los mas tradicionales , hasta el punto de haberlo elegido como el principal patrono. Son juzgados, sin embargo,  desfavorablemente. Por la critica algunos hechos históricos en el que se supone la intervención de aquel, por ejemplo el de la batalla de Clavijo.